martes, 23 de febrero de 2016

Programación Predictiva: normalizando la usura en las relaciones personales

La Programación Predictiva es una herramienta usada en todos los ámbitos de poder que se precien. Con ella se moldean las voluntades de las personas para que crean lo que han sido condicionadas a creer. Se fijan límites de tiempo y se actúa en consecuencia.

Por ejemplo: queremos que en tres años la opinión mayoritaria esté a favor de la pena de muerte, o de iniciar una guerra, o de los calzoncillos rosas por fuera del pantalón. Entonces se pone en marcha la maquinaria propagandística, que abarca todas las facetas comunicativas (prensa, radio, T.V., cine, etc.) y se va dando visibilidad a la idea por todos los frentes.

Por ejemplo, los calzoncillos rosas: un día aparece Llustin Biber totalmente colocado en una fiesta en Malibú con unos calzones rosas encima del pantalón. Al cabo de un mes, Ortega y Gasset, famosos diseñadores de moda, presentan en una pasarela a su mejor modelo con calzoncillos de encaje rosa. Tiempo después, Labuenorra Deturno, famosa actriz y cantante y presentadora y madre y escritora y embajadora de unicef y bióloga y concienciada y empresaria y ecologista y moderna comenta que los hombres con calzoncillos rosas la ponen cachonda. Cristiano Follardo sale de su Lamborghini con esmoquin y calzoncillos rosas de seda. Luego el famoso filósofo y académico de la lengua y millonario playboy Tony Stark escribe un apasionado ensayo sobre la liberación masculina y los gallumbos.
Por último, ya totalmente normalizado el tema, el presidente del gobierno se dirige a la nación con sus correspondientes calzoncillos. El atril del congreso ha sido convenientemente recortado para que se aprecie bien el flamante complemento masculino.

En Maldita Propaganda usamos la fina y la gruesa ironía para comentar estos temas, pero no tienen ninguna gracia y son muy serios y a tener en cuenta.

Aquí vemos un ejemplo de programación predictiva que quiere poner las relaciones personales al nivel del comercio:

Si usted vende el producto a tres personas, recibe una comisión. Se convierte usted en representante de comercio, en intermediario a comisión.
Hemos de suponer entonces que la empresa en cuestión tendrá que darle de alta en la Seguridad Social, y que todos los impuestos han de ser satisfechos tanto por la empresa como por el trabajador.
En caso contrario, se incurre en fraude... ¿no?

"Si tienes un amigo, tienes un tesoro" Hasta las frases populares, la mayor parte de las veces cargadas de razón, pueden ser utilizadas en su contra.

Lo que realmente nos alarma aquí es la utilización de los amigos y familiares como mero recurso económico. Como un activo del que uno dispone para invertir.

En Bankia van mucho más lejos, y ya hablan de comisiones que uno paga en la vida por atender y compartir con sus seres queridos. Atentos a la jugada:

Repugnante, que otra cosa se puede decir.

Si, queridos, ahora las cosas que hacemos por los demás son comisiones que pagamos. Y si no cumplimos nuestros "contratos sociales" se nos penaliza comisioemocialmente. Es natural que nuestra pareja nos cobre una "comisión" por irnos con los amigos. Nos imaginamos la escena y vomitamos.
Por favor, cualquiera que tenga una pareja así, que huya a Sebastopol.


Si tu amiga te cobra comisiones emocionales, no es tu amiga. Si demandas comisiones por tu amistad, no eres humano. Rata, tal vez.

No se pueden destruir las relaciones personales sin destruir a las personas, pero sí que se puede modificar el objeto de las relaciones personales.
Se puede implantar la idea de que las personas son vampiros que quieren aprovecharse de uno.
Con esa idea en mente uno se convierte en huraño, egoísta, desconfiado, incapaz de dar, incapaz de aceptar. Se inhumaniza, aunque a efectos de la economía se sigue siendo perfectamente funcional. Incluso más eficiente, si cabe.
Al no confiar en nadie, se han de comprar todas las cosas.
Uno puede comprar amigos, ocio, hijos, con la ventaja de que si no queda satisfecho, se le compensa con el reembolso o el cambio por un producto de similar valor.

Esta campaña de cambio de conciencia se lleva a cabo desde todos los medios y desde hace mucho mucho tiempo.
Los ejemplos arriba citados no son más que la punta de iceberg.
Desgraciadamente esta campaña de cambio de conciencia se está revelando efectiva, y suponemos que en un futuro no muy lejano la forma de vida en las ciudades y, en general, en el mundo "civilizado", será muy diferente... y aterradora.

¡Uno con alma! ¡Que no escape!

martes, 9 de febrero de 2016

Golpe de efecto a la estafa de las hipotecas

Nos despertamos con una estupenda noticia publicada por el periódico de antigua gran tirada El País: Los jueces frenan desahucios de bancos que vendieron sus hipotecas.

En el artículo le dicen que esas personas han "ganado tiempo", dando a entender que al final tendrán que pagar. Pagar a los que le roban en lugar de encarcelarlos por estafa, que gracioso.

Gracias al excelente trabajo de José Manuel Novoa Novoa y su excelente blog "Ataque al Poder", a la "Asociación de Hipotecados Activos", a los abogados José Ángel Gallegos o Oscar L. Viera, por ejemplo, a Mitoa Edjang Campos y su programa "El Vórtice"... y a tantas otras personas que de verdad trabajan con los hechos y no con ideologías.

Gracias como decimos a ellos y a tantos otros, los banqueros empiezan a acogotarse. No es para menos.

Venden su inversión (su hipoteca) a un fondo y luego se la reclaman como si fueran los dueños. Venden el pescado por lo menos tres veces:

- Le hacen un préstamo con dinero que no tienen, avalado por la firma de usted.
- Venden ese préstamo a un tercero.
- Le reclaman, además, el aval (su casa o su suegra, por ejemplo) si usted no paga las cuotas, aunque no tengan derecho.
- Si entrega el aval, sigue debiendo el "préstamo"...
- Entra usted en listas de morosos...

Son unos cracks.

También ha quedado en entredicho, por fin, el papel de la asociación por la dación en pago, quedando como instrumento de la banca para asegurarse la posesión de los avales. En este caso los inmuebles y similares.

Si existiera un aparato de justicia realmente funcional en este país o en cualquier otro, la fiscalía actuaría de oficio contra todos los bancos que hubieran ejecutado hipotecas que no les pertenecían, restaurando las propiedades a sus legítimos dueños, amén de la indemnización correspondiente.

Si existiera un aparato de justicia realmente funcional muchísima gente iría a la carcel por estafa.
Como tal cosa no existe ni se la espera, somos nosotros mismos los que hemos de cuidarnos, conociendo la ley.

No nos durmamos en los laureles, ya que la banca no se va a quedar de brazos cruzados.
En estos momentos andarán pensando que ojalá a nadie se le ocurra extrapolar esta vía judicial a los créditos al consumo, por ejemplo.
En Maldita Propaganda apostamos a que todo está titulizado y vendido al mercado de inversión. Desde su tarjeta de crédito hasta el mismísimo director.
No estaría de más tirar también de ese hilo.

Desafortunadamente el refranero español no se puede utilizar como prueba incriminatoria en un juicio, porque viendo en que condiciones se encuentran los bolígrafos en las entidades bancarias es evidente que el dueño del negocio cojea de un pie muy concreto.

"Cree el ladrón que todos son de su condición" Desafortunadamente esta evidencia no se puede usar en un juicio.


Tal vez en un futuro...

Que nadie crea ni por un momento que si desaparecen los bancos o son severamente castigados, no serán sustituidos por otro aparato incluso peor.
Historicamente ha sido casi siempre así.

Más información en: http://arucasblog.blogspot.com/2016/01/son-las-titulizaciones-la-salvacion-los.html

martes, 2 de febrero de 2016

Gas Natural Fenosa: primero te la clavan y luego te lo dicen.

Efectivamente, se lo están diciendo en la publicidad.
Primero hacen y luego dicen.


Y si no le gusta se jode, imbécil.

Primero hacen lo que quieren con las condiciones del "servicio" y luego se lo dicen en la factura.
Porque ellos son así.
Porque pueden.
Y si no le gusta se va a la empresa de la "competencia"

A pesar de todas las sandeces que se dicen de la democracia y el libre mercado, el sector energético es un monopolio, como el de la alimentación, el vestido y muchísimas otras cosas más.
O se apunta voluntariamente al tinglado o sale todos los días a buscar leña para la hoguera, usted mismo.

Como hemos oído decir ya unas cuantas veces al ínclito presentador del ínclito programa radiofónico "Desmontando a Babylon", la democracia es elegir entre huevo frito o tortilla.

Aunque no lo parezca, hay una gran diferencia.


Elija usted deprisa, que se enfría. El pan se cobra aparte.

Si no fuera tan triste la triste realidad, reiríamos de gusto.